sábado, 13 de diciembre de 2008

¿Quién dijo crisis?


Nuestra sociedad arrastra una crisis económica que viene de lejos y que parece no encontrar solución. Mientras que el paro sigue aumentando (ya son 2.989.269 personas las afectadas) y los problemas económicos son cada vez mayores, llegamos a unas fechas en el que gastar parece irremediable. Sí, ya llega la Navidad.


Según un estudio sobre el gasto navideño de la consultora Deloitte, en el 2007 los españoles se gastaron 951 euros de media entre comida, regalos, fiestas y lotería. Para este año, se espera una caída del 6% a causa de la crisis, este año se gastarán aproximadamente 814 euros de media. Y yo me pregunto, ¿acaso estando en crisis se puede derrochar tantísimo dinero en un par de semanas? No puedo llegar a entender cómo personas que están en paro porque su empresa ha ido a pique compran décimos y décimos de lotería, soñando quizás, que esta es la solución para afrontar la crisis. Tampoco entiendo cómo ayuntamientos decoran las calles con tantas luces. Vale, decorar las calles en esta época nos sumerge más en la navidad pero no creo que sea la mejor manera de intentar disminuir los gastos. ¡Con lo que ha subido el precio de la luz!


Por otro lado, la Unión de Consumidores de España quiere adelantar las rebajas al día 2 de enero en todo el país, considerando que esta medida contribuiría a reactivar el sector comercial y beneficiaría los intereses económicos de los consumidores. Esto puede que ayude a comprar a menor precio artículos de regalo, pero a la vez nos tienta a gastarnos más dinero del que deberíamos.


¿Se acuerdan de la felicidad de sus madres cuando por su cumpleaños le regalaban un dibujo? Sí, tenían 6 ó 7 años pero se pasaban días dibujando y coloreando el mejor dibujo para ella, sin gastarse ni una peseta, pero para ella era el mejor regalo que le podrían hacer, porque demostraba cariño, amor y afecto. No les digo que estas Navidades regalen dibujos a sus familiares, pero sí que piensen antes de comprar, y que un simple detalle que demuestre lo que sienten muchas veces se valora más que cualquier otro regalo caro.

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