lunes, 20 de abril de 2009

Medida desorbitada.

Hoy en día muchas personas sufren de sobrepeso, en especial en Los Estados Unidos, donde más de un tercio de la población es obesa. Ese elevado porcentaje está causando diversos problemas, entre ellos en el transporte público. Muchos viajeros han mostrado sus querellas ante la compañía aérea United Airlaines porque no pudieron aguantar tener que viajar con el pasajero de al lado ocupando su espacio. Por eso la compañía ha anunciado que a partir de ahora las personas que ocupen más espacio del de un asiento deberán pagar dos en el caso de que el vuelo vaya completo.

Esta noticia ha dividido a la crítica en dos. Los hay los que han sufrido una experiencia similar a los demás pasajeros , que son los que se muestran de acuerdo con la declaración, y por el contrario, los que buscan soluciones y remedios a la causa. ¿Qué pasa con el derecho de los obesos?, ¿Por qué tienen que pagar el doble cuando muchos de ellos padecen una enfermedad? ¿Por qué no se les culpa a las grandes compañías de comida basura por este elevadísimo incremento de peso en las persona?

Aunque teniendo en cuenta que por exceso de peso en el equipaje es obligatorio pagar una tasa, ¿no deberían de pagar ellos también? Sin embargo, no nos cobran menos por llevar a un niño, cuando su peso es menor. Con lo cual ¿Cómo decidir quién debe pagar más? Sería lamentable obligar a los clientes a subirse a una báscula antes de embarcar. Por lo tanto, esta nueva medida ridiculiza y hace sentirse mal a dichas personas.

Lo que se debería hacer es procurar respetar los derechos de todos los pasajeros, y para ello adecuar una zona en la que los que sufren sobrepeso no tengan que ir como anchoas en latas, no deban pagar el doble y no interfieran en la comodidad del pasajero de al lado. El problema es que las compañías de aviones prefieren ganar dinero con soluciones rápidas y económicamente rentables, que invertir dinero en hacer el avión más accesible para todos los pasajeros.

Con lo cual, no creo que se trate de una solución ante un problema, sino de una buena excusa para seguir ganando dinero, y más aún ahora que estamos en tiempo de crisis. Tal vez todos seamos unos hipócritas, y por eso preferimos culpar a las personas que sufren de sobrepeso, porque trae menos dolores de cabeza que plantear soluciones y defenderlas.

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