Nuestro padres no hacen más que quejarse, diciendo que ellos cuando eran jóvenes no tenían tanta ropa como nosotros, que no se podían permitir ir de viaje al extranjero etc. pero ¿que hay de la música?, ellos vivieron a los Beatles , ¡Pudieron conocer a John Lennon!, escucharon a AC/DC cuando todavía vivía Bon Scott y a los Rolling Stones sin arrugas y artrosis, lloraron escuchando tocar a Led Zeppelin Starway to Heaven, cuando aun eran cuatro y John Bonham aporreaba la batería como solo el sabía hacerlo. Y a pesar de muchos ya tener hijos, tuvieron la oportunidad de ver a Guns n’ Roses antes de que Axl Rose, cantante y líder del grupo, se volviese loco y empezase a echar del grupo cada uno de los miembros del grupo, y acabara contratando a músicos tan estrafalarios como el guitarrista Buckethead, un tipo que lleva una careta blanca y una cubeta de Kentucky Fried Chicke
n sobre su cabeza. ¿Y nosotros que tenemos? A una enferma mental que se afeita la cabeza, golpea periodistas con el paraguas, y no sabe cantar, y un tipo de música llamado reguetón (aunque no se si a esto se le puede llamar música), surgido en los noventa e influenciado por el hip hop, el rap y el reggae que tiene un alto contenido violento, sexual y machista. Si Bob Marley se levantase y oyese lo que ha surgido de la música que el tanto amaba, no tengo ninguna duda de que volvería a caer muerto inmediatamente.
A nuestra generación nos ha tocado vivir quizás, la peor etapa del Rock & Roll. Todos aquellos que creías, que resurgiría, olvidaros. Esos años de juerga e inconformismo han pasado a la historia, y es que la gran mayoría de los jóvenes prefieren oír a Barbies medio retrasadas sin talento, que lo único que tienen bueno es el aspecto físico y letras vacías y superficiales, que no consiguen ni rozar el corazón. Esas voces increíbles y solos interminables de guitarra, capaces de desgarrar el alma de cualquiera, quedaran atrás y desaparecerán en cuanto los miembros de los grupos surgidos hace más de 30 años sean demasiado viejos como para continuar ejerciendo. Pero no penséis que el Rock & Roll desaparecerá, porque como dijo Neil Young: “El Rock and Roll no morirá jamás”. Porque por mucho que no surjan nuevas bandas o no aparezcan en los medios de comunicación, siempre estará dentro de nosotros.
n sobre su cabeza. ¿Y nosotros que tenemos? A una enferma mental que se afeita la cabeza, golpea periodistas con el paraguas, y no sabe cantar, y un tipo de música llamado reguetón (aunque no se si a esto se le puede llamar música), surgido en los noventa e influenciado por el hip hop, el rap y el reggae que tiene un alto contenido violento, sexual y machista. Si Bob Marley se levantase y oyese lo que ha surgido de la música que el tanto amaba, no tengo ninguna duda de que volvería a caer muerto inmediatamente.A nuestra generación nos ha tocado vivir quizás, la peor etapa del Rock & Roll. Todos aquellos que creías, que resurgiría, olvidaros. Esos años de juerga e inconformismo han pasado a la historia, y es que la gran mayoría de los jóvenes prefieren oír a Barbies medio retrasadas sin talento, que lo único que tienen bueno es el aspecto físico y letras vacías y superficiales, que no consiguen ni rozar el corazón. Esas voces increíbles y solos interminables de guitarra, capaces de desgarrar el alma de cualquiera, quedaran atrás y desaparecerán en cuanto los miembros de los grupos surgidos hace más de 30 años sean demasiado viejos como para continuar ejerciendo. Pero no penséis que el Rock & Roll desaparecerá, porque como dijo Neil Young: “El Rock and Roll no morirá jamás”. Porque por mucho que no surjan nuevas bandas o no aparezcan en los medios de comunicación, siempre estará dentro de nosotros.
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